Consejos para la adaptación de material
En muchas ocasiones el maestro o maestra de aula podrá llevar a cabo adaptaciones sencillas de material para resolver de manera rápida necesidades emergentes.
Para ello podrá utilizar herramientas que le permitan generar relieves (rueda dentada, punzón o el propio bolígrafo con el papel colocado sobre una plantilla de dibujo positivo) o diseñará imágenes mediante el uso de texturas.
A continuación se presentan algunos consejos a tener en cuenta a la hora de adaptar materiales en relieve. Aunque aparecen separados en función de si el alumno o alumna es ciego o tiene resto visual, se recomienda que en cualquier material se incluyan los parámetros correspondientes a ambos grupos para que éste sea lo más versátil posible:
Para alumnado con ceguera:
- En la medida de lo posible, utilizar texturas que se asemejen al tacto que el elemento representado tendría en la realidad.
- Asegurar que los materiales se adhieren al soporte de forma duradera y segura. Evitar las piezas demasiado pequeñas que se puedan arrancar y tragar en el caso de niños y niñas pequeños.
- Distinguir los elementos clave de los innecesarios y eliminar estos últimos, ya que pueden distorsionar la información esencial en la que el niño o niña se debe fijar.
- Colocar pocos elementos en una lámina dado el carácter analítico del tacto; si se requieren más elementos, es preferible utilizar varias láminas.
- Utilizar la forma más prototípica de la figura, bien de frente o de perfil.
- Evitar el uso de perspectivas en los paisajes y, sobre todo para niños y niñas pequeños, mantener la línea del suelo en la parte inferior de la lámina y de cielo en la parte superior.
- Destacar en cada elemento un aspecto clave que haga que el niño o niña lo reconozca con facilidad (bigotes en el gato, trompa en el elefante, etc.).
- Mantener constantes las características de un mismo elemento si éste aparece varias veces en cuanto a forma, posición, tamaño y textura.
- Entre los distintos elementos debe haber una separación suficiente para que ésta pueda ser percibida.
- El tamaño de cada ilustración debe ser abarcable con las dos manos.
Para alumnado con resto visual:
- En los textos, se utilizará de manera preferente la letra Arial. El tamaño utilizado será como mínimo de 14, si bien éste se adaptará a la funcionalidad visual de cada alumno o alumna concretos.
- Contrastar bien los elementos respecto del fondo, con contornos concretos y gruesos, y sin fondos que distraigan al estudiante de las figuras principales.
- Utilizar colores contrastados como por ejemplo el negro sobre blanco, blanco sobre negro o el amarillo sobre negro.
- No utilizar papel brillante o con destellos.
- Evitar las sombras de los objetos porque pueden confundirse con otros elementos.
- Minimizar la superposición de figuras y maximizar el contraste entre figuras cercanas.
- El tamaño de las figuras debe ser acorde al tipo de patología visual del alumno o alumna.